Existen dos tecnologías de limpieza muy similares, pero en cuanto al resultado, eficiencia y ahorro no se pueden comparar. Las dos tecnologías, son los equipos de chorreado y la limpieza por ultrasonidos.
Los equipos de chorreado pueden ser arenadoras, granalladoras y chorreadoras. Cada uno de los distintos métodos de chorreado, tienen como objetivo la preparación y tratamiento de superficies. Dicho tratamiento se ejecuta antes de la aplicación de cualquier tipo de revestimiento o pintura. Es necesaria la limpieza de la superficie para asegurar que se adhiere bien la aplicación, siendo de suma importancia la eliminación de aceites, grasas, y otros contaminantes como la cascarilla de laminación y oxido.
Las granalladoras y arenadoras tienen la misma función que el chorro abrasivo húmedo, empleándose en piezas donde necesitan limpieza de algún modo, como la eliminación de herrumbre, incrustaciones, rebabas etc. Se suelen utilizar microesferas de vidrio para chorrear o granallar la superficie a tratar. Existen bastantes tipos de chorreado, la elección se verá influenciada por el tipo de suciedad a tratar y el material de la pieza. Por ejemplo, el granallado por turbina y los equipos de chorreado por aire comprimido, se utilizan en aéreas extensas, por la necesidad de eliminar el oxido o que necesitan limpieza de algún modo.
Los equipos de chorreado tienen varias ventajas, pero también desventajas, poniéndolas en la balanza, pesan más las segundas. Se trata de una tecnología sostenible y la eliminación de la suciedad es asegurada. Sin embargo, la mayoría de dichos equipos dañan la superficie y cierran los poros, por lo que altera la superficie y es muy agresivo para muchos materiales. Cabe destacar que solo serviría para piezas que se pueden desmontar, ya que las piezas no desmontables se pueden llegar a dañar. Los materiales abrasivos son necesarios para el funcionamiento de los equipos, produciendo un alto consumo de agua, abrasivo, siendo menos respetuoso con el medioambiente.
Por otro lado, la limpieza por ultrasonidos, es una tecnología aplicable a los mismos sectores industriales que los equipos de chorreado, por ejemplo en las piezas de fundición. Al examinar ambas en detalle, los ultrasonidos presentan más beneficios, entre ellos los más destacables son:
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La presencia del operador no es necesaria, ya que la limpieza ultrasónica es automática (ahorro en mano de obra).
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Las piezas se limpian es su totalidad, por fuera y por dentro de las cavidades.
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No daña la superficie
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Limpieza homogénea
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Escaso consumo de agua y detergente
Todas las cubas están construidas en acero inoxidable, dicho material es necesario para evitar la corrosión del equipo.
Para concluir, ambas tecnologías están creadas para la limpieza y mantenimiento de piezas y superficies a tratar. No obstante, los ultrasonidos tienen unas ventajas difíciles de obviar, pudiendo optimizar todos los recursos necesarios en ambas tecnologías. Como por ejemplo, el ahorro de agua, mano de obra, ahorro energético y detergente. Sin dejar de destacar mayor respeto hacia el medioambiente.
