Los sistemas de Limpieza por Ultrasonidos se basan en ondas sónicas de alta frecuencia, que se transmiten a través de un líquido en el que se sumerge la pieza a limpiar. El tratamiento dura entre 10 y 45 minutos, y no necesita la presencia del operario.
Ideal para la limpieza de metales, las ondas de Ultrasonidos producen Cavitación, fenómeno por el cual millones de pequeñas burbujas de aire se generan en el líquido y son comprimidas hasta que implosionan, lanzando grandes cantidades de energía. Esta energía impacta en la suciedad, grasa o carbonilla adherida sobre la superficie de los objetos a limpiar, eliminándolas sin dañar la pieza y ofreciendo gran resistencia a la corrosión dependiendo de las aleaciones.
El resultado es un micro-cepillado que limpia las piezas tratadas. Cómo las burbujas de aire tienen un tamaño menor a 1µm, penetran en cada orificio por pequeño que sea. Por ello, la Limpieza por Ultrasonidos el mejor sistema para componentes de alta complejidad en cualquier tipo de material (fundición, acero, aluminio, cobre, bronce, titanio, bronce, algunos plásticos y cauchos, …).